El método de las "5S" y su aplicabilidad en las organizaciones educativas
El Prof. Reinaldo López
Ordóñez (2012), en su manual tan popular, nos dice que la escuela "es un
centro de trabajo organizado que ejerce una acción a través de una entidad que
cumple actividades fundamentales de administración de una buena empresa, como
son: planificación, ejecución y evaluación", concepto muy interesante pues
nos muestra la escuela como empresa, como una buena empresa, que debe
organizarse para ejercer su función.
Es por ello, que como entidad empresarial, aunque lo trascienda, debe
buscar los medios para mantener su eficacia y eficiencia en su gestión. Una
técnica que podría implementar para su mejoramiento es el método de las “5S”.
La firma Toyota, y otras
empresas japonesas, hacia los años 60, identificaron una técnica sencilla que
le permitía lograr lugares de trabajo mejor organizados, más ordenados y más
limpios de forma permanente para lograr una mayor productividad y un mejor entorno
laboral.
Las “5S” son las iniciales
de cinco palabras japonesas que nombran a cada una de las cinco fases que
componen el método, las cuales responden a los siguientes vocablos y conceptos:
-
SEIRI.- CLASIFICACIÓN. Consiste en identificar y separar los materiales
necesarios de los innecesarios y en desprenderse de estos últimos. Tal práctica
no solo sirve para las labores cotidianas del personal que en una escuela
labora, sino que en la misma didáctica se hace imprescindible para delimitar
los contenidos y alcances de los aprendizajes.
-
SEITON.- ORDEN. Se trata de establecer el modo en que deben ubicarse e
identificarse los materiales necesarios, de manera que sea fácil y rápido
encontrarlos, utilizarlos y reponerlos. A nivel administrativo o de mantenimiento
redunda en una labor más eficiente ya que, entre otras cosas, permite tener
visible y al alcance los materiales de trabajo; a su vez, a nivel didáctico va
imprimiendo un valor disciplinario tanto en profesores como en el alumnado.
-
SEISO.- LIMPIEZA. Basada en identificar y eliminar las fuentes de suciedad,
asegurando que todos los medios se encuentran siempre en perfecto estado. No es
difícil inferir que ambientes limpios proporcionan espacios agradables para las
prácticas laborales y educativas, a la vez que influyen positivamente en la
salud de quienes los ocupan.
-
SEIKETSU.- ESTANDARIZACIÓN. El objetivo es distinguir fácilmente una situación
normal de otra anormal, mediante normas sencillas y visibles para todos. A
nivel práctico, perseverar en mantener los espacios bajo tales condiciones, va estableciendo
un marco que poco a poco es interiorizado por las personas, lo cual promueve la
formación de criterio, carácter y estabilidad.
-
SHITSUKE.- DISCIPLINA Y HÁBITO. Consiste en trabajar permanentemente de acuerdo
con las normas establecidas. Esta última, estimula el sano desarrollo de las
capacidades personales y sentido de responsabilidad.
El tren directivo, la plana
administrativo y obrera pueden ejecutar de manera práctica y sencilla esta
metodología, pues las tres primeras fases son operativas, la cuarta fase tiende
a mantener el estado alcanzado en las anteriores, y la quinta fase permite
adquirir el hábito de su práctica y mejora continua en el trabajo.
Este método permite que la escuela
como centro de trabajo organizado funcione de una manera óptima, pues mejorar el entorno de
trabajo dentro del centro, ofreciendo un servicio educativo más eficiente. Que podemos apreciar en:
- Incremento del compromiso y responsabilidad con las tareas a cargo.
- Ganancia de espacio.
- Desarrollo de un trabajo colaborativo y en equipo.
- Aumento del sentido de pertenencia.
- Más conocimiento del puesto de trabajo.
- Mejora en la imagen ante la comunidad educativa y sus alrededores.
En conclusión, la escuela, por estar estructuralmente
concebida como una empresa desde el punto de vista administrativo, puede echar
mano de estrategias y métodos organizacionales para optimizar su
funcionamiento; lo cual no desmerece su condición de agente de socialización sino
que, por el contrario, al alcanzar entornos laborales más organizados y
limpios, tales ambientes impactan positivamente hacia niveles de mayor
productividad. En este sentido, el método de las cinco “s” se presenta como un
modelo ideal para tal finalidad, en virtud de que sus elementos contienen
valores disciplinarios análogos a los utilizados en procesos de enseñanza
aprendizaje, tales como la disciplina, el orden, el trabajo colaborativo, la belleza
estética, la perseverancia, entre otros, que puestos en práctica en los ámbitos
administrativo, pedagógico y laboral, redundan en una escuela eficiente, y en
quienes la integran, un fuerte sentido de pertenencia.
AUTORES:
HNA. DELIS ROMERO.
MOISÉS GRANADOS.
JOSÉ LUIS MARTÍN
Fuentes
y Referencias Bibliográficas.
-FERNANDEZ, JUAN S. Temas de
Sociología de la Educación. Universidad de Almería, 2000.
-LOPEZ, Manual del Supervisor,
Director y Docente, Volumen 6, Caracas,
2012.
-CURA, Hugo M. “Las "cinco S": Una filosofia de trabajo, una
filosofia de vida”. http://www.ucema.edu.ar/productividad/download/2003/Cura.pdf
-
-ZAMBRANO, Pavel, “Manual de Organización de 5 S’s + 1”. Universidad
Autónoma de Nayarit, (2011). http://calidad.uan.edu.mx/WEB2/Proc_gob/Auditoria_int/MANUAL-DE-5S.pdf